Los antecedentes clínicos y la exploración física a menudo sugieren la causa del mal torácico y las pruebas que pueden ser necesarias. Siempre y cuando el médico lo considere y albergue dudas, se solicitará una Ecocardiografía realizada por un cardiólogo infantil, que es un médico especializado en cardiología. Es una prueba indolora, no emite radiación y nos da una información muy valiosa de la estructura y anatomía del corazón así como de su desempeño. Recomendada especialmente en los neonatos o lactantes donde el riesgo de cardiopatía es mucho más elevado que en los niños más mayores. Más de la mitad de los pequeños a lo largo de su niñez lo presentarán en un momento preciso de su vida. Radiografía de tórax, ecocardiografía o ecografía del corazón, biomarcadores de patología cardiaca, analítica sanguínea y bioquímica, electrocardiograma en pos de arritmias.
Puede aparecer tanto en animales jóvenes (problemas innatos), como adultos, siendo más frecuente en animales de edad avanzada. La mayor parte de los no-soplos dan rincón a síntomas, y se advierten en general en el curso de un examen físico rutinario. Los síntomas van a depender de la enfermedad valvular que genere el BUF y el nivel de implicación de la válvula. Primeramente, el médico pregunta sobre los síntomas del tolerante y su historial médico y, ahora, realiza una exploración física.
Si la afección se agudiza con el tiempo puede desembocar en insuficiencia cardíaca. Esto se debe a que el corazón enfermo ya no es capaz de sostener una circulación sanguínea satisfactoria. El soplo inocente tiene una auscultación típica, diríase que es “musical o vibratorio”. Frecuenta escucharse mejor en el borde izquierdo del esternón y no se irradia a otros focos cardiacos. Aunque esta información ha sido redactada por un experto médico, su edición fué llevada a cabo por cronistas, con lo que es un contenido únicamente orientativo y sin valor de indicación terapéutica ni diagnóstica.
Si el soplo no se soluciona, su médico veterinario puede recomendar pruebas diagnósticas adicionales para investigar más a fondo. Además de esto, el corazón del niño no ha completado su avance, y ciertas secciones del mismo tienen la posibilidad de ser todavía pequeñas para la considerable suma de sangre que debe atravesarlo. No está claro, no obstante, que estas sean las únicas causas de los soplos inocentes en los niños. Ante alguno o varios de estos síntomas, siempre y en todo momento es conveniente acudir al veterinario, donde se realizará una exploración general del animal. En caso de existir un inconveniente cardiaco, frecuenta manifestarse con la auscultación de unsoplo cardiaco.
Algo afín al agua que fluye por un río, sin ningún obstáculo, tiene un flujo que podríamos llamar laminar. Si colocáramos un obstáculo en la mitad del río se produciría una turbulencia del agua al chocar contra el mismo, mudando el sonido. O sea lo que pasa con la perturbación del flujo de la sangre en el corazón. El punto de la caja torácica y el momento del ciclo cardiaco en que se observa el soplo ofrecen pistas sobre su origen, pero un diagnóstico confiable 100% necesita una ecografía del corazón. En la niñez, hasta en el 85% de los pequeños se ausculta alguna vez un soplo de tipo «inocente» o funcional. En casos mucho más graves, es frecuente que, tras subir una escalera, o de caminar en el transcurso de un buen rato, nuestros labios y la punta de los dedos adquieran una tonalidad azulada.
¿Debo Tratar A Mi Perro Con Soplo Debido A Patología De La Válvula Mitral?
No se debe ir al cardiólogo todos los años a felicitarle las fiestas ni debemos producir tal ansiedad a los progenitores. ¿El cardiólogo te dijo que es un soplo inocente y que no le des más vueltas? Pues despídete de él y la próxima vez que lo veas, que sea en el parque mientras vuestros hijos se pelean por subir al columpio. Si hay antecedentes de muertes súbitas en la familia, muertes antes de los 50 años, antecedentes de anomalías de la salud del corazón en pequeños o en adultos. Más allá de que es cierto que no existe nada que se pueda realizar para evitar el soplo cardíaco, debemos tener en cuenta que no es una enfermedad y, en la mayor parte de las oportunidades, es inofensivo. Por otra parte, junto con las pruebas médicas correctas y un examen físico completo, el médico podría saber cuál podría ser la causa del soplo cardíaco.
Inca ya había sido iniciada en el tratamiento de un inconveniente cardíaco, antes de asistir a la Clínica Estoril, con un fármaco con la capacidad de aumentar la capacidad para contraerse de su corazón, el pimobendan. Decidimos sostener este fármaco y añadimos vasodilatadores mixtos y diuréticos; benaceprilo y furosemida respectivamente. La función de los primeros es la de hacer más simple el trabajo del corazón. Digamos que al “ensanchar” las arterias, la fuerza que debe vencer el corazón para bombear la sangre es menor. Por otro lado, el “ensanchar las venas” hace que éstas tengan mayor aptitud de drenaje.
Soplo Inocente O Funcional, ¿debo Preocuparme?
Sin embargo, a menudo los soplos cardiacos son inofensivos , con lo que no precisan ningún género de régimen médico. Pero ciertos soplos sí pueden necesitar pruebas de seguimiento, con el objetivo de cerciorarse de que no sean a causa de la existencia de algún trastorno cardíaco grave que no ha podido ser diagnosticado. Otras dolencias, como la anemia y la fiebre, pueden ocasionar soplos temporales no atribuibles a una anomalía cardíaca primaria. En esos casos, el soplo deberá desaparecer al resolverse la patología en cuestión.
Por el hecho de que efectivamente en un porcentaje bajo de casos existe nosología cardiaca que ha de ser diagnosticada y estudiada. Precisamente, cuando el médico escucha el latido cardíaco con un estetoscopio, no es extraño que detecte un ruido anormal, que recibe el nombre de BUF. En condiciones normales, los movimientos de las válvulas cardiacas causan ruidos secos, que reciben el nombre del primer y segundo sonido cardiaco. Hay murmullos de aspectos y de intensidad diversos, pero por norma general se podría decir que la respiración suele ser un barrio como un ruido diferente, que recuerda al sonido del viento, un susurro o un soplo, como su nombre lo indica. En el 98-99% de las oportunidades no va a haber ninguna enfermedad detrás que justifique alarma ninguna y se diagnosticará de “soplo inocente”.
Pruebas Y Exámenes
En otros casos el origen está en un inconveniente con una válvula en el corazón, como la estenosis aórtica o una válvula aórtica bicúspide. Asimismo pueden deberse a problemas ventriculares, como la insuficiencia mitral funcional. Otras patologías como la endocarditis y el lupus, también tienen la posibilidad de ocasionar un soplo cardiaco, así como una patología cardíaca innata. No obstante, a veces la sangre fluye formando turbulencias, lo que genera un sonido anormal, llamado soplo cardiaco. Su nombre tiene que ver con el hecho de que el sonido que siente el profesional al investigar nuestros latidos se asemeja al que emitimos al soplar.
Las 14 consultas están en un único espacio, en algunos casos dividido por una mampara opaca de vidrio que separa el propio despacho de la zona de exploración. Cada solicitud cuenta con el equipamiento correspondiente para el diagnóstico o el régimen propios de las especialidades que aloja. Lo cierto es que aun con todo no se excluye al cien% la posibilidad de tener alguna nosología grave aunque con la implantación de este tipo de programas se quiere reducir el peligro de muerte súbita cardíaca.
Causas Del Mal Torácico
Recomendamos al lector/a que cualquier duda relacionada con la salud la consulte directamente con el profesional del campo sanitario correspondiente. Los soplos funcionales no se tratan dado que no indican ninguna patología. Con una supervisión regular y régimen, ha de ser con la capacidad de seguir realizando la mayor parte de sus ocupaciones diarias. Emite señales eléctricas para hacer a su corazón latir a un ritmo y velocidad regular.
O sea su corazón se contrae mucho más fuerte y por consiguiente es capaz de bombear más sangre en todos y cada latido. Logra aumentar la capacidad para contraerse del corazón enfermo, lo que soluciona el primordial problema de King. No hay nada que podamos realizar para prevenir esta dolencia específicamente, pero si es importante controlar periódicamente a los perros de determinadas etnias.
Los soplos funcionales o inocentes no son peligrosos y son frecuentes en los niños, dejando de generarse en la edad avanzada. Si tú perro ya muestra síntomas y tiene insuficiencia cardiaca es obvio que necesita ahora un tratamiento. En las situaciones en los que aún no muestra síntomas es muy importante llevar a cabo un estudio cardiaco para saber si ya presenta dilatación del corazón y si es así, si ya tiene un grado bastante para favorecerse de un tratamiento. El veterinario va a medir una serie de índices en radiografía y ecografía que le van a aceptar saber si ya precisa tratamiento. Se conoce que los perros asintomáticos que muestran soplo por enfermedad de la válvula mitral, con preciso nivel de agrandamiento cardiaco, retrasan una media de 15 meses la aparición de síntomas clínicos si se comienzan a tratar.
Asimismo las perras embarazadas tienen la posibilidad de sufrir soplos cardiacos temporales que desaparecen una vez recuperado el cuerpo tras el embarazo. Los mucho más habituales son los soplos sistólicos, esto es, los generados en el momento en que el corazón se contrae y también inyecta la sangre en la aorta y en el tronco pulmonar. Al tiempo que los soplos diastólicos son menos frecuentes y se perciben con la relajación de ambos ventrículos en la entrada de la sangre que viene de las aurículas. Ninguno; los soplos inocentes o funcionales son un hallazgo casual al auscultar a un niño o, más infrecuentemente, a una persona de mayor edad.
En la mayoría de las situaciones, los soplos cardiacos no son graves, y no afectan a la salud del bebé, pero a veces pueden ser parte de una afección mucho más grave. Un soplo cardíaco es un sonido anormal que se genera debido a vibraciones o turbulencias que la sangre causa en el momento en que fluye a través del corazón. En general se revela cuando un médico lo escucha por medio de un estetoscopio. Comunmente son benignos y no causan complicaciones, pero en ocasiones tienen la posibilidad de indicar una afección cardiaca grave, por lo que lo mejor es realizar un estudio que analice la causa de su prevalencia. En los pequeños son bastante habituales –aproximadamente el 72% lo sufre– pero varios desaparecen con la edad.